Skip to main content

Pedro: Zarandeado para el servicio


If you are unable to see the message below, click here to view.

 

 

18 de septiembre de 2014
¿Ha experimentado usted alguna vez una situación aparentemente imposible de soportar? Años más tarde, ¿se dio cuenta de cómo le preparó la prueba para lo que vendría después?
La Biblia nos dice que el Señor, algunas veces, permitirá que seamos “zarandeados” para un mayor servicio. En otras palabras, puede dar permiso a Satanás para que toque un aspecto de nuestra vida. Dios lo hace para fortalecer nuestra fe y para transformarnos en testigos más poderosos para Él.
En el pasaje de hoy del Evangelio de Lucas, Jesús explica este proceso a Pedro: “Satanás ha pedido zarandearlos a ustedes como si fueran trigo. Pero yo he orado por ti, para que no falle tu fe. Y tú, cuando te hayas vuelto a mí, fortalece a tus hermanos” (Lc 22.31, 32 NVI).
Cristo sabía lo que iba a suceder en los días siguientes —moriría en la cruz, resucitaría, y luego ascendería al cielo. Esperaba que Pedro fuera el líder de sus discípulos, y que hiciera grandes cosas para el reino. Pero Pedro no estaba preparado.
Por tanto, el Señor permitió que Satanás “zarandeara” a Pedro. Al hacer esto, Dios separaba el “trigo” de la “paja” —los aspectos piadosos de la vida del discípulo, de los pecaminosos. Al final, Pedro se volvió más fuerte por la experiencia, pasó a tener un papel clave en la extensión del evangelio después de la resurrección de Cristo, y al final murió por su fe valiente.
Si Dios no hubiera permitido ese tiempo de zarandeo, Pedro no habría estado preparado para las cosas que vendrían. Al reflexionar en cuanto a su vida, ¿cómo le ha preparado Dios para los tiempos difíciles?
La senda de la madurez espiritual


Cancelar suscripción | Suscribirse al devocional | Suscribirse a la revista | Contáctenos | EnContacto.org
Conéctese en Facebook | Síganos en Twitter | Envíe este correo a un amigo
Este correo electrónico fue enviado por Ministerios En Contacto: 3836 DeKalb Technology Parkway
Atlanta, Georgia 30340-3604 | Tel: 1-800-303-0033

Comments

Popular posts from this blog

COMMIT TO

In the face of widespread insecurity, fear, and hopelessness, our nation desperately needs your prayers. Join us in praying for our nation, that God will heal our land.

Pablo reprende a Pedro

Pero cuando Pedro vino a Antioquía, le resistí cara a cara, porque era de condenar. Pues antes que viniesen algunos de parte de Jacobo, comía con los gentiles; pero después que vinieron, se retraía y se apartaba, porque tenía miedo de los de la circuncisión. Y en su simulación participaban también los otros judíos, de tal manera que aun Bernabé fue también arrastrado por la hipocresía de ellos. Pero cuando vi que no andaban rectamente conforme a la verdad del evangelio, dije a Pedro delante de todos: Si tú, siendo judío, vives como los gentiles y no como judío, ¿por qué obligas a los gentiles a judaizar? Nosotros, judíos de nacimiento, y no pecadores de entre los gentiles, sabiendo que el hombre no es justificado por las obras de la ley, sino por la fe de Jesucristo, nosotros también hemos creído en Jesucristo, para ser justificados por la fe de Cristo y no por las obras de la ley, por cuanto por las obras de la ley nadie será justificado. Y si buscando ser justificados en Cristo, tamb...

El quebrantamiento de Pedro

If you are unable to see the message below, click here to view .     Leer | Lucas 22.54-62 11 de noviembre de 2014 El orgullo de Pedro era un obstáculo para los propósitos de Dios. Cristo buscaba a un siervo-líder para que guiara a los creyentes una vez que Él regresara al cielo. El antiguo pescador era un impulsivo sabelotodo, pero el Señor vio su potencial a pesar de su arrogancia. Por eso, el gran Artesano utilizó una filosa herramienta —la humillación— para quebrantarlo. Cuando las palabras del Señor estuvieron en conflicto con la opinión de Pedro, el discípulo reprendió temerariamente a Jesús. El Salvador respondió con una virulenta reprimenda, tanto para silenciar como para enseñar ( Mt 16.21-23 ; Jn 13.5-8 ). Inclusive, Pedro incumplió su promesa de morir por el Señor cuando lo negó tres veces ...