Skip to main content

El sufrimiento a solas

28 de octubre de 2013
¿Alguna vez estuvo usted en medio de una crisis personal, y sintió que sus amigos habían desaparecido? Aunque los perdonó por abandonarle en un tiempo de necesidad, es posible que ellos todavía no hayan vuelto para ofrecerle ayuda. En situaciones como ésta, es importante recordar a Aquel que promete estar con nosotros todo el tiempo.
Cuando Pablo estaba sufriendo por su “aguijón en la carne”, el Señor le dijo: “Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad” (2 Co 12.7-9). En otras palabras, le estaba diciendo al apóstol: “Yo cuidaré de ti”.
En nuestros momentos más difíciles, cuando no nos queda nada, podemos encontrar fuerzas en Dios. Él no tiene una reserva limitada de gracia y ayuda. Tenemos exactamente lo que necesitamos cuando nos hace falta. Nuestro Padre ha dicho: “Nunca te desampararé, ni te dejaré” (He 13.5), y Él no tiene ninguna intención de romper esa promesa.
Puede ser que nunca sepamos por qué el Señor permitió que nuestros amigos nos abandonaran cuando los necesitábamos. Pudo haber estado tratando de enseñarnos a confiar en Él. A veces, la única manera como podemos aprender a apoyarnos en Dios, es descubrir que todas las demás ayudas han desaparecido.
En algún momento, todos experimentaremos el dolor del abandono. Pero una cosa es cierta: el Señor Jesús estará a nuestro lado para fortalecernos y proveer en nuestro tiempo de necesidad. Un día, tendremos el privilegio de mirar atrás y ver cómo Él demostró su fidelidad una y otra vez.
Dios te bendiga!

Comments

Popular posts from this blog

COMMIT TO

In the face of widespread insecurity, fear, and hopelessness, our nation desperately needs your prayers. Join us in praying for our nation, that God will heal our land.

Pablo reprende a Pedro

Pero cuando Pedro vino a Antioquía, le resistí cara a cara, porque era de condenar. Pues antes que viniesen algunos de parte de Jacobo, comía con los gentiles; pero después que vinieron, se retraía y se apartaba, porque tenía miedo de los de la circuncisión. Y en su simulación participaban también los otros judíos, de tal manera que aun Bernabé fue también arrastrado por la hipocresía de ellos. Pero cuando vi que no andaban rectamente conforme a la verdad del evangelio, dije a Pedro delante de todos: Si tú, siendo judío, vives como los gentiles y no como judío, ¿por qué obligas a los gentiles a judaizar? Nosotros, judíos de nacimiento, y no pecadores de entre los gentiles, sabiendo que el hombre no es justificado por las obras de la ley, sino por la fe de Jesucristo, nosotros también hemos creído en Jesucristo, para ser justificados por la fe de Cristo y no por las obras de la ley, por cuanto por las obras de la ley nadie será justificado. Y si buscando ser justificados en Cristo, tamb...

El quebrantamiento de Pedro

If you are unable to see the message below, click here to view .     Leer | Lucas 22.54-62 11 de noviembre de 2014 El orgullo de Pedro era un obstáculo para los propósitos de Dios. Cristo buscaba a un siervo-líder para que guiara a los creyentes una vez que Él regresara al cielo. El antiguo pescador era un impulsivo sabelotodo, pero el Señor vio su potencial a pesar de su arrogancia. Por eso, el gran Artesano utilizó una filosa herramienta —la humillación— para quebrantarlo. Cuando las palabras del Señor estuvieron en conflicto con la opinión de Pedro, el discípulo reprendió temerariamente a Jesús. El Salvador respondió con una virulenta reprimenda, tanto para silenciar como para enseñar ( Mt 16.21-23 ; Jn 13.5-8 ). Inclusive, Pedro incumplió su promesa de morir por el Señor cuando lo negó tres veces ...