Where the Battle Is Won

April 5, 2012
Matthew 26:36-56

If you want to experience victory in the conflicts you face, consider how Jesus fought and won His battles. The pivotal battle of His life was fought even before He arrived at the cross. Praying at Gethsemane, He wrestled with the knowledge that He would bear the terrible weight of sin and endure spiritual separation from the Father.

In His special place of prayer, Jesus got alone on His face before the Father and cried out. And when He left that garden, He walked out a victor over Satan, whose sway over mankind was about to be broken on the cross. Jesus would still drink the cup of suffering and separation, but He knew that in the end, He would triumph (Heb. 12:2). That's why He could face His opponents with courage and authority. When Jesus went to confront the arresting party, He was in full control of the situation, so much so that the Pharisees and soldiers "drew back and fell to the ground" (John 18:6). He allowed them to arrest Him, determined to do His Father's perfect will.

If you're in the habit of regularly spending time alone with God, you will come to know His heart and mind. Then, when you encounter major decisions with lifelong consequences, you'll be able to discern the guidance He offers through His Spirit.

When you fully surrender, you place the consequences of your decision into the hands of an all-knowing, all-loving, all-powerful God who holds the past, present, and future. Even when you face staggering trials, you can do so with courage and power that will glorify God and shame the Enemy.

God bless you!!

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