Por otra parte, tuvimos a nuestros padres terrenales que nos disciplinaban, y los venerábamos. ¿Por qué no obedeceremos mucho mejor al Padre de los espíritus, y viviremos? Y aquéllos, ciertamente por pocos días nos disciplinaban como a ellos les parecía, pero éste para lo que nos es provechoso, para que participemos de su santidad. Es verdad que ninguna disciplina al presente parece ser causa de gozo, sino de tristeza; pero después da fruto apacible de justicia a los que en ella han sido ejercitados. Por lo cual, levantad las manos caídas y las rodillas paralizadas; (Hebreos 12:9-12 RVR60) Aquellos de nosotros que nos acordamos de como nuestros padres nos disciplinaban y entendimos después de años lo importante que fue. Porque se nos hace difícil obedecer al Padre que esta en los cielos. Tu puedes hacer el cambio si pasaste por disciplina. Orar sin cesar!! Dios te bendiga!! Amén
Comments
Post a Comment