Skip to main content

¿Por qué perdemos la paz?

12 de septiembre de 2013
Uno de los mayores enemigos de la paz es el delirio de grandeza tan generalizado en esta generación. Muy pocas personas están satisfechas con lo que les ha tocado en la vida. Detrás de este descontento está la falsa suposición de que la sociedad les debe algo, o que sus derechos no están siendo tomados en cuenta. Este tipo de pensamiento narcisista puede introducirse en los negocios, los matrimonios, las iglesias y otras instituciones, generando todo clase de discordias y provocando consecuencias de gran repercusión.
Este es el tipo de situación que se estaba creando en el capítulo 13 de Génesis. Abram y su sobrino Lot estaban tratando de vivir en un territorio que era demasiado pequeño para las abundantes propiedades de ambos hombres. La presión se volvió tan grande que hubo una enorme contienda entre los pastores de Abram y los de Lot. Había que hacer algo.
Abram, con su sabiduría, alivió la tensión al ofrecer a Lot que eligiera sus pastizales (Gn 13.9). En vez de reñir por sus supuestos derechos, Abram escogió el camino de la paz. Hizo lo que el apóstol Pablo aconsejó siglos más tarde, cuando escribió: “Con honra, daos preferencia unos a otros” (Ro 12.10 LBLA).
¿Salió perdiendo Abram por ser generoso con Lot? De ninguna manera. Preste atención a las palabras de Dios al patriarca después de dejar voluntariamente el excelente territorio a su sobrino Lot y marcharse (Gn 13.14, 15) —el Señor tuvo a bien prometer toda esa tierra, y más allá de ella, a Abram y sus descendientes. Nuestro Dios bendice a los pacificadores (Mt 5.9).
Dios te bendiga!

Comments

Popular posts from this blog

COMMIT TO

In the face of widespread insecurity, fear, and hopelessness, our nation desperately needs your prayers. Join us in praying for our nation, that God will heal our land.

Pablo reprende a Pedro

Pero cuando Pedro vino a Antioquía, le resistí cara a cara, porque era de condenar. Pues antes que viniesen algunos de parte de Jacobo, comía con los gentiles; pero después que vinieron, se retraía y se apartaba, porque tenía miedo de los de la circuncisión. Y en su simulación participaban también los otros judíos, de tal manera que aun Bernabé fue también arrastrado por la hipocresía de ellos. Pero cuando vi que no andaban rectamente conforme a la verdad del evangelio, dije a Pedro delante de todos: Si tú, siendo judío, vives como los gentiles y no como judío, ¿por qué obligas a los gentiles a judaizar? Nosotros, judíos de nacimiento, y no pecadores de entre los gentiles, sabiendo que el hombre no es justificado por las obras de la ley, sino por la fe de Jesucristo, nosotros también hemos creído en Jesucristo, para ser justificados por la fe de Cristo y no por las obras de la ley, por cuanto por las obras de la ley nadie será justificado. Y si buscando ser justificados en Cristo, tamb...

El quebrantamiento de Pedro

If you are unable to see the message below, click here to view .     Leer | Lucas 22.54-62 11 de noviembre de 2014 El orgullo de Pedro era un obstáculo para los propósitos de Dios. Cristo buscaba a un siervo-líder para que guiara a los creyentes una vez que Él regresara al cielo. El antiguo pescador era un impulsivo sabelotodo, pero el Señor vio su potencial a pesar de su arrogancia. Por eso, el gran Artesano utilizó una filosa herramienta —la humillación— para quebrantarlo. Cuando las palabras del Señor estuvieron en conflicto con la opinión de Pedro, el discípulo reprendió temerariamente a Jesús. El Salvador respondió con una virulenta reprimenda, tanto para silenciar como para enseñar ( Mt 16.21-23 ; Jn 13.5-8 ). Inclusive, Pedro incumplió su promesa de morir por el Señor cuando lo negó tres veces ...