Leer | GÉNESIS 37.12-36
2 de abril de 2013
Hay circunstancias en la vida que están claramente fuera de nuestro control y por tanto, no podemos detectar ni un destello de alivio para el futuro. En momentos así, ¿de qué podemos estar seguros?
• De que Dios está con nosotros en las tribulaciones. Nuestro Padre celestial nos consuela por medio del Espíritu Santo. El Señor quiere que estemos conscientes de su presencia constante para que la conciencia de su amor y su poder nos ayude a sentirnos seguros. Dios entiende lo que es sufrir, ser rechazado, o perder a un ser querido. Comprende las tentaciones y los obstáculos que enfrentamos. Él se ha kasignado a sí mismo la tarea de llevar las cargas de sus hijos (Sal 68.1-9), y brindar paz a nuestros corazones afligidos. El Dios que camina con nosotros no puede ser obstaculizado o limitado por nada, y por eso no tenemos razones para temer (Mt 19.26).
• Dios tiene un propósito al permitir las pruebas. Esto se ve claramente en la historia de José, cuyos hermanos lo vendieron como esclavo. Dios había previsto que esos años prepararan al joven para que se convirtiera en primer ministro de Egipto. José no podía ver el propósito de Dios -al igual que nosotros la mayoría de las veces-, pero conocía el carácter del Señor y confiaba en Él. La fe de José fue recompensada cuando fue capaz de salvar a su familia (Gn 45.1-8).
Estamos llamados a vivir una vida de Fe. Eso significa que debemos creer las promesas de Dios, aun cuando nuestras circunstancias nos desconcierten. Cuando los problemas le rodeen, recuerde esta verdad: Dios nunca le desamparará ni le dejará (He 13.5), y los buenos propósitos de Él siempre se cumplirán (Pr 19.21).
Dios te bendiga!
|
Gracias doy a mi Dios siempre por vosotros, por la gracia de Dios que os fue dada en Cristo Jesús; porque en todas las cosas fuisteis enriquecidos en él, en toda palabra y en toda ciencia; así como el testimonio acerca de Cristo ha sido confirmado en vosotros, de tal manera que nada os falta en ningún don, esperando la manifestación de nuestro Señor Jesucristo; el cual también os confirmará hasta el fin, para que seáis irreprensibles en el día de nuestro Señor Jesucristo. Fiel es Dios, por el cual fuisteis llamados a la comunión con su Hijo Jesucristo nuestro Señor. Os ruego, pues, hermanos, por el nombre de nuestro Señor Jesucristo, que habléis todos una misma cosa , y que no haya entre vosotros divisiones , sino que estéis perfectamente unidos en una misma mente y en un mismo parecer . Porque he sido informado acerca de vosotros, hermanos míos, por los de Cloé, que hay entre vosotros contiendas. Quiero decir, que cad...
Comments
Post a Comment