Ciertamente llevó él nuestras enfermedades, y sufrió nuestros dolores; y nosotros le tuvimos por azotado, por herido de Dios y abatido. Mas él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados; el castigo de nuestra paz fue sobre él, y por su llaga fuimos nosotros curados. Todos nosotros nos descarriamos como ovejas, cada cual se apartó por su camino; mas Jehová cargó en él el pecado de todos nosotros. (Isaías 53:4-6 RVR60) Si recordamos este sacrificio todos los días, podríamos cambiar el plan de juego que llevamos, a pesar de no haberlo merecido Cristo murió por Ti y por Mi. Gloria a Dios que Cristo Vive para siempre. Mi esperanza para seguir luchando.. Orar sin cesar!! Dios te bendiga!! Amén
Comments
Post a Comment