Skip to main content

El peligro del dinero

26 de junio de 2013
El dinero no es bueno ni malo. No obstante, el afán por él puede ser muy peligroso para nuestras almas.
Dios creó a la humanidad para que le amara, pero desde la tentación en el huerto del Edén, la gente entregó su corazón a deseos inferiores. El amor al dinero no solo le roba a Dios su debido lugar; también roba el contentamiento, lleva a diversas tentaciones, y puede hacer que nos apartemos de nuestro Creador.
Pero la cantidad de dinero que tengamos no es la fuente del problema. La raíz tiene su origen en los deseos del corazón. Nunca nos parece que tenemos suficiente, no importa cuál sea nuestra situación económica. El atractivo del dinero promete placeres y seguridad, pero si nos consagramos a la búsqueda de las riquezas, descubriremos que solo conduce a la perdición y al sufrimiento.
Marcos 4.19 habla del “engaño de las riquezas”. Haga memoria del día cuando compró algo que realmente necesitaba. ¿Recuerda la satisfacción que le producía ese artículo cuando estaba nuevo? ¿Qué me dice de ahora? ¿Se siente de la misma manera? La satisfacción que dan las cosas materiales es pasajera y, por tanto, se hace necesaria la búsqueda de más para recuperar la misma sensación de gratificación.
El placer duradero y la seguridad se encuentran únicamente en Dios. Él “nos da todas las cosas en abundancia para que las disfrutemos” (1 Ti 6.17). Pero si dejamos que los bienes se conviertan en nuestro deseo principal, perderemos nuestro contentamiento. Busque al Señor por medio de su Palabra y la oración; al aprender a deleitarse en Él, usted descubrirá la satisfacción verdadera para su alma.
Dios te bendiga!

Comments

Popular posts from this blog

Acción de gracias por dones espirituales

Gracias doy a mi Dios siempre por vosotros, por la gracia de Dios que os fue dada en Cristo Jesús;   porque en todas las cosas fuisteis enriquecidos en él, en toda palabra y en toda ciencia;   así como el testimonio acerca de Cristo ha sido confirmado en vosotros,   de tal manera que nada os falta en ningún don, esperando la manifestación de nuestro Señor Jesucristo;   el cual también os confirmará hasta el fin, para que seáis irreprensibles en el día de nuestro Señor Jesucristo.   Fiel es Dios, por el cual fuisteis llamados a la comunión con su Hijo Jesucristo nuestro Señor.    Os ruego, pues, hermanos, por el nombre de nuestro Señor Jesucristo, que habléis todos una misma cosa , y que no haya entre vosotros divisiones , sino que estéis perfectamente unidos en una misma mente y en un mismo parecer .   Porque he sido informado acerca de vosotros, hermanos míos, por los de Cloé, que hay entre vosotros contiendas.   Quiero decir, que cad...

Las 7 Iglesias y las presentes

Las características del sermón a las 7 Iglesias. Hoy sería a la Iglesia de Gainesville, no cabe ninguna duda que la religión ha sido uno de nuestros mayores tropiezos a nivel mundial. Se podría decir que la religión ha separado naciones enteras y ha puesto un pueblo entero en enemistad. El consejo al angel de la Iglesia fue muy claro escuchar. El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las Iglesias. Me encanta el plural a las Iglesias ósea a cada uno de nosotros que formamos parte del cuerpo. El conocimiento y las características que tenía cada una de las Iglesias no ha cambiado en nada de esta instrucción que la puedes encontrar en Apocalipsis 1,2,3. Todos hemos aprendido algo y nos dice acuérdate de todo lo que aprendiste. ¿Para que? Si la religión me da un patrón de conducta a seguir, entonces cuál es la libertad que nos habla Gálatas que dice: “Estad, pues, firmes en la libertad con que Cristo nos hizo libres, y no estéis otra vez sujetos al yugo de esclav...

Pablo reprende a Pedro

Pero cuando Pedro vino a Antioquía, le resistí cara a cara, porque era de condenar. Pues antes que viniesen algunos de parte de Jacobo, comía con los gentiles; pero después que vinieron, se retraía y se apartaba, porque tenía miedo de los de la circuncisión. Y en su simulación participaban también los otros judíos, de tal manera que aun Bernabé fue también arrastrado por la hipocresía de ellos. Pero cuando vi que no andaban rectamente conforme a la verdad del evangelio, dije a Pedro delante de todos: Si tú, siendo judío, vives como los gentiles y no como judío, ¿por qué obligas a los gentiles a judaizar? Nosotros, judíos de nacimiento, y no pecadores de entre los gentiles, sabiendo que el hombre no es justificado por las obras de la ley, sino por la fe de Jesucristo, nosotros también hemos creído en Jesucristo, para ser justificados por la fe de Cristo y no por las obras de la ley, por cuanto por las obras de la ley nadie será justificado. Y si buscando ser justificados en Cristo, tamb...